 |
| Tegus, Aby Camilo y Mere, con algunos niños del taller de libro cartonero en San José Chiapa. |
El sábado pasado Aby, Camilo y yo, estuvimos visitando la comunidad lectora de la biblioteca Apapacho en San José Chiapa, Puebla, en torno a su festival "Toltecayotl" organizado por René, la mediadora de éste hermoso punto de lectura, que convocó a muchos niños y sus familias, en un sábado con viento y sonrisas junto al kiosko del municipio. Apenas colocábamos los tapetes para el tendido de libros, muchos niños comenzaron a llegar, pidiendo acomodar los libros en el "diablito" de apapacho, un librero portátil que resguarda en su cuerpo espacios para colocar los libros en muchas posiciones. Acostados en grandes y coloridas almohadas, los niños comenzaron a explorar los libros, muchos de los asistentes, ya expertos y cotidianos lectores, se lanzaron a las ilustraciones y a los textos llenos de curiosidad y emoción.
Nuestro taller comenzó con una mesa, por el gran viento que habita en el pueblo, los niños recolectaron piedras del parque para que pudiésemos asegurar que los materiales no volaran por el aire. Comenzamos explorando el mapa de Centroamérica, la bandera de Nicaragua y luego a nuestra estrella del día: Rubén Darío. Leímos el poema e imaginamos un mundo con paz y con guerra, un cantor que viaja por los continentes en el lomo de un elefante o en el de un dromedario, en un tren con vagones donde se duerme, en auto, en canoa o en góndola, nos redescubrimos en un lago enorme que cruza un país y también en un caballo, los cantores van y vienen por todo el mundo. En algún momento de las fotos con los libros, un niño preguntó si en un avión que había pasado cortando una nube, podría ir también el cantor por el cielo. Y sí, los cantores como Darío, que viajaron y exploraron el mundo, seguro también lo hubieran hecho por el cielo, pero él murió unos años antes que comenzaran las exploraciones aéreas. Entusiasmados todos, chicos, grandes, papás y bebés, hablamos sobre los paisajes, los libros que se llaman atlas, los poemas, leímos en voz baja, en susurradores, en micrófono- Mere, comenzó a rapear el poema de Darío- una niña admirada, mirando a Mere me dijo, ¿cómo le hace para ser tan graciosa?, me gusta- a mí también, deberías leer también, y contagiada leyó en el micrófono- así, leímos este poema a muchas voces, con muchos cantores de San José Chiapa.
Simultáneamente, se llevaba a cabo el taller de ojos De Dios que dio René, donde las mamás y algunos papás disfrutaron de tejer colores en torno a unos palitos de madera, muchos niños se integraron también. Iban y venían del ojo De Dios al poema de Darío. Después de una foto junto a las letras de Chiapa, comenzó el taller de experimentación de ritmo y armonía de Mizra, quien con un Korg, un micrófono y un iPad, hizo junto con los niños un Soundtrack súper pegajoso de la biblioteca, apapacho, que nos urge tener para poder escucharla. El día comenzó a cerrar con nuestros amigos de El Callejón del Gañán, Ana y Adrián expertos en juegos y lectura, caminaron con los niños con los ojos vendados por el parque, en fila india y en torno al juego de las sillas que no excluye a nadie, reímos todos juntos en torno a la música, para finalmente cerrar la tarde con un concierto de trova de un cantor de Grajales. Todo, documentado por nuestro fotógrafo estrella: Dante.
Muchas gracias al festival Totecayotl de la biblioteca apapacho de San José Chiapa, por esta fiesta de lectura, viento y colores 📖 a Alas y Raices Puebla por permitirnos conocer este municipio lleno de 40 niños participativos, por dejarnos entrar en sus sonrisas, entre mapas e imágenes el mundo a través de un poema de Rubén Darío. A Mere y Daniela por su entusiasmo y su compromiso con el trabajo en torno a la infancia en Puebla.
Estamos llenos y contentos del alma y el corazón 📖🐃💓🌾💕
Atte. Tegus el Toro Poético Imaginario
🥳
No hay comentarios:
Publicar un comentario